Con extracto de jazmín, con efecto calmante y relajante.
En KHAMA, cada fórmula del Ritual del Sueño ha sido desarrollada en laboratorio bajo estrictas normas de calidad europeas (Reglamento CE 1223/2009), evaluada por expertos en seguridad cosmética y testada dermatológicamente. Nuestros productos cumplen con las Buenas Prácticas de Fabricación (GMP) y han superado estudios de estabilidad, microbiología y compatibilidad dérmica, garantizando su eficacia, seguridad y respeto por la piel.
Si has realizado tu compra online, dispones de un plazo de 14 días naturales para ejercer tu derecho de desistimiento, siempre que los productos no hayan sido abiertos ni manipulados. Por razones de higiene, no se admiten devoluciones en tienda física. Si necesitas ayuda con una devolución o tienes dudas sobre el envío, estamos aquí para ayudarte.
No solo huele bien, también está bien hecho. Cada fórmula del Ritual del Sueño está avalada garantizando su calidad, su respeto por tu piel y su compromiso con el planeta.
Proyecto testado y respaldado por:
Nuestro equipo de especialistas en descanso estará encantado de hacerlo.
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Paso 4. La bruma del Ritual del Sueño está formulada con extracto de jazmín, conocido por su efecto calmante y relajante sobre el sistema nervioso.
Aplicada sobre la almohada y la ropa de cama, libera un aroma suave que transforma el ambiente en un refugio de calma, ayudando a tu cuerpo a desconectar y prepararse para el descanso.
El Ritual del Sueño está pensado para aislar el cuerpo y la mente de todo lo que pueda interrumpir el descanso.
A través de cuatro pasos, crea una atmósfera que te envuelve, te calma y te prepara para un sueño profundo y continuo.
Es una forma de reconectar contigo antes de dormir. Descubre cada paso y haz de tu rutina nocturna un refugio para el cuerpo y la mente.
Paso 1. Detergente:
Sábanas limpias, suaves y con aroma a jazmín. Así empieza el descanso
Paso 2. Jabón:
Cuida tu piel con probióticos y deja que el jazmín te ayude a bajar el ritmo.
Paso 3. Crema hidratante:
Piel hidratada, protegida y lista para relajarse.
Paso 4. Bruma relajante:
Un par de pulverizaciones y tu cama se convierte en el lugar más tranquilo del día.