Para dormir bien, un colchón debe proporcionar la firmeza y el confort ajustado a nuestro peso y altura (IMC)


Si el colchón tiene la firmeza adecuada para tu IMC te ofrecerá un equilibrio perfecto entre dureza y adaptabilidad, proporcionándote un descanso saludable.

Si el colchón es demasiado firme para tu IMC puede generarte una presión excesiva que te provoque dolencias en los hombros, las piernas o la zona lumbar.


FIRMEZA SUAVE
IMC entre 16.5 y 24.9
Si este es el resultado de tu IMC, la tuya es la firmeza suave (S). En KHAMA la conseguimos mediante una tecnología híbrida formada por una capa de espuma Bluemoon − de alta resistencia, pero suave y esponjosa− que colocamos sobre una base de muelles ensacados Multispring.

FIRMEZA MEDIA
IMC entre 25.0 y 29.9
A IMC medio, firmeza media (M). Tu colchón KHAMA será el compuesto por látex orgánico combinado con un núcleo interior de muelles ensacados Multispring. ¡Confort asegurado!



FIRMEZA FIRME
IMC entre 30.0 y 39.8
Firmeza firme (F), valga la redundancia, para aquellos IMC más elevados. Aquí el secreto está en la viscoelástica de alta densidad sobre los ya famosos muelles ensacados Multispring.

Ideal para parejas
Cuando la cama es compartida, y el colchón el mismo para los dos, es inevitable que uno salga perdiendo. Lo normal es que cada miembro de la pareja tenga un IMC distinto y, por tanto, necesite un colchón de diferente firmeza que se adapte a sus necesidades.
En KHAMA tenemos la solución. Personalizamos cada lecho del colchón, ajustándolo al peso y a la altura de cada durmiente. Fácil, sencillo y a pedir de boca.