La ropa de cama perfecta para dormir bien
La cama y la ropa de cama perfecta no debería ser la del hotel de las pasadas vacaciones. Que también podría ser, porque KHAMA viste habitaciones de hoteles por todo el mundo. Desde Maldivas hasta Chiclana, pasando por Zurich, Marsella, Barcelona, Madrid, San Sebastián o Montego Bay, en Jamaica, por ejemplo. Pero no, la cama perfecta debería ser la nuestra, la de casa. La que nos abraza y nos acaricia cada noche. La que cuida de nuestros sueños y de nuestro descanso.
Elegir y vestir bien la cama con la ropa de cama perfecta debería ser una función vital, principalmente por la vital función que desempeña el descanso en nuestras vidas. Vital y a diario. Una tercera parte de nuestra vida la pasamos en ella. Nos sobran los motivos. Aunque en este caso no sean «los últimos versos que te escribo» previos a una —siempre— dolorosa despedida, como refleja la canción de Sabina. Nos sobran los motivos para querernos mejor.
Ropa de cama de color blanco
La cama perfecta debería vestir los colores de la pureza y la perfección. De la limpieza y de la paz. El color blanco. El color que ordena todo el desorden. El color que representa la libertad. El color que marca cada comienzo. El color blanco aporta el equilibrio necesario para un descanso equilibrado.
En KHAMA disponemos de un catálogo de productos apoyados en el blanco. Colchones, almohadas y ropa de cama. Todo del color que representa la paz. Productos fabricados con algodones orgánicos, hipoalergénicos y transpirables en el caso de las fundas nórdicas. Sábanas con algodones peinados de 500 hilos para una inigualable sensación de descanso. Abrigos, en el caso del edredón nórdico Bianco, de plumón natural y algodón orgánico, cómodo y ligero. O sábanas de algodón de 300 hilos de gran suavidad y textura confortable.
En KHAMA tenemos todo lo necesario para hacer de tu cama la cama perfecta.