Ventajas de fabricar colchones con algodón orgánico

En Khama, a la hora de fabricar colchones, preferimos utilizar tantos materiales naturales como nos sea posible, por eso entre nuestros favoritos se encuentra el algodón orgánico.

Colchones con algodón orgánico o como proteger tu salud preservando el medio ambiente.

¿Qué me aporta que mi colchón tenga algodón orgánico?

El algodón orgánico es un material fresco al contacto de la piel y muy transpirable. Por eso siempre se recomienda vestir ropa de algodón en verano. Así que si añadimos este material al colchón, conseguimos que sea un poco más fresco y transpirable.

Al tratarse de un producto orgánico no se han utilizado pesticidas o herbicidas en su plantación. ¿Qué significa esto? Pues que ninguna de estas sustancias nocivas para la salud se encuentran en la elaboración de colchones que han sido elaborados con algodón orgánico, evitando por ejemplo la aparición de alergias.

El algodón orgánico es mucho más suave al contacto con la piel que el algodón tradicional. El algodón tradicional se somete a unos procesos que rompen más las fibras y las desgastan, el tejido acaba sufriendo. El algodón orgánico no pasa por procesos que rompan sus fibras y las endurezcan, por lo que tenemos un material de mejor calidad.

Para las personas que presentan eczemas o dermatitis atópica, es recomendable el uso de  los tejidos realizados en algodón orgánico. Al tener una piel tan sensible y ser el algodón orgánico un material respetuoso y delicado con la piel, este tejido resulta el adecuado. 

¿Cómo influye en mi alrededor que se haya utilizado algodón orgánico?

Cuando compramos productos realizados con materiales orgánicos, estamos ayudando a conservar nuestro ecosistema, ya que:

El algodón convencional utiliza más insecticidas que cualquier otro cultivo. Se estima que el 25% de los insecticidas utilizados en el mundo están en este tipo de cultivos, y que el 10% pesticidas a nivel mundial se usan en estas plantaciones.

Los componentes químicos usados en estas plantaciones perjudican la salud de los trabajadores. Según la Organización Mundial de la Salud unas 20.000 muertes ocurren cada año por envenenamiento de pesticidas. En EEUU, por ejemplo, más de 10.000 granjeros mueren al año de cáncer cuyos síntomas están relacionados con las sustancias químicas con las que tienen que trabajar.

Los productos químicos no se quedan sólo en el algodón, acaban en nuestras tierras, acuíferos, ríos… por lo que contaminamos nuestro propio planeta. Con esto, ponemos en riesgo la diversidad de cada zona.

Así pues, cuando contamos con productos realizados por ejemplo, con algodón orgánico, no sólo estamos contribuyendo a mejorar nuestra calidad de vida, nuestro bienestar y conseguir un descanso más saludable sino también ayudamos al medio ambiente, fomentando el descanso natural.

Es nuestra responsabilidad hacer este mundo un poco más sostenible y conservarlo para futuras generaciones y una forma es pedir que tu colchón esté elaborado con materiales orgánicos y fabricados con procesos de mínimo impacto medioambiental.